
El artista Nick Laessing explora las zonas fronterizas de la ciencia sondeando su relación con lo inconcebible y utópico. En sus obras investiga las teorías sobre la energía libre, la fusión fría o las nuevas formas de propulsión, pero sin rechazar a priori que sus propuestas puedan fracasar al explorar aquellas vías energéticas que históricamente se han considerado inviables, obsoletas o han sido deliberadamente silenciadas por la Historia.
El proyecto Water Gas Car considera la posibilidad de revitalizar el motor de agua y probar su viabilidad e integración como combustible no contaminante a partir de las experimentaciones del inventor estadounidense Stanley Meyer que presentó y patentó un automóvil que, según afirmaba, funcionaba solo con agua y aire. Sin embargo, su motor fue considerado por la comunidad científica como pseudociencia o, al menos, como una propuesta incompleta y no concluyente. Pese a todo, en enero de 2013, junto con Jimmy Whitmore, ingeniero del Reino Unido, Nick Laessing adaptó un coche VW Golf de 1998 para que funcionara con agua y lo condujo desde su estudio en Ámsterdam hasta Ginebra. La idea fue provocar la electrólisis, que consiste en la descomposición del agua (H2O) en los gases oxígeno (O2) e hidrógeno (H2) por medio de una corriente eléctrica continua que se conecta mediante electrodos al agua, a través de placas solares, de manera que el oxígeno retornara a la atmósfera y el hidrógeno fuera usado para propulsar el motor. De hecho, en 2016, el artista y su colaborador condujeron su coche hasta el centro de arte FACT de Liverpool donde se presentó junto a un documental que narraba sus experiencias, aciertos, problemas y soluciones tecnológicas, todas ellas expuestas en abierto, con la intención de reavivar el camino hacia una revisión utópica, pero aún posible y sostenible de la recursividad y circularidad energética.




Vista de la instalación en la exposición No Such Thing As Gravity en el FACT de Liverpool (2016-2017).

Vista de la instalación en la exposición No Such Thing As Gravity en el FACT de Liverpool (2016-2017),

Vista de la instalación en la exposición No Such Thing As Gravity en el FACT de Liverpool (2016-2017).